terça-feira, 1 de janeiro de 2013

TERMINOU 2012!
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E com ele terminou também a publicação em papel da revista "La Fotografia"...
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Una suave despedida.

A lo largo de sus 23 años de trayectoria la revista "La Fotografía Actual" ha vivido momentos difíciles, eufóricos, momentos de plenitud y serena felicidad, y así podríamos continuar hasta completar las múltiples experiencias y ánimos que conforman cualquier vida.

De todos los vividos, sin duda el más duro es éste, en el que la revista "La Fotografía Actual" se dejará de editar temporalmente en el formato papel de siempre. 
Sí, habéis leído bien, y aunque la sorpresa que sentiréis no podamos compartirla, sabemos que compartimos la misma tristeza.

Queridos lectores, colaboradores, simpatizantes y allegados, tras meses de resistencia, de esfuerzo y de búsqueda de salidas posibles a esta desoladora situación económica que vivimos, nos hemos visto obligados a aceptar la realidad y proceder al ritmo que marcan los números, muy diferente, como suele pasar, al del corazón.

Mucho más allá de sus 152 números, con sus decenas de kilos de peso o sus cientos de páginas impresas, "La Fotografía Actual" es una parte de la vida de su equipo, es la ilusión en un proyecto apasionante, la suma de infinitas y valiosas aportaciones, la pasión compartida con miles de personas por el arte de la luz, infinitos momentos de complicidad, de emoción…Inacabables recuerdos que no se olvidarán nunca, el cariño y amistad de muchos de vosotros y, sobre todo, vuestras imágenes en nuestras retinas.

Con la convicción de su regreso, sabemos que con el inicio de este paréntesis se cierra un ciclo, se acaba una época. El sector fotográfico y editorial ha vivido en estas dos décadas una evolución muy profunda, con un cambio sustancial en las formas, contenidos y usos. Y, no dudamos que los próximos años traerán nuevos cambios y  perfilarán un nuevo horizonte en el que esperamos estar presentes.
Os agradecemos enormemente que hayáis estado ahí todo este tiempo, sin vosotros, esta maravillosa aventura, jamás hubiese sido posible.

¡Hasta siempre!
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